Joel Santana, exentrenador del Flamengo, Corinthians, Vasco da Gama, y de la selección de Sudáfrica, entre tantos otros, fue entrevistado por Globo Esporte (GE) durante esta semana para recordar su amplia trayectoria al frente de los más diversos equipos alrededor del mundo.

Entre las preguntas le fue cuestionado cuál fue la peor derrota de su carrera, a lo que el brasileño apuntó a una de ellas contra el América de México en pleno Maracaná en los octavos de final de la Copa Libertadores 2008, en la cual el exfutbolista paraguayo, Salvador Cabañas, fue el héroe.

“Perdí aquel juego contra ese tal (Salvador) Cabañas, ese tipo acabó conmigo. Ese miserable (risas)”, fueron las palabras de Santana, actualmente con 76 años de edad y desde 2018 jubilado como técnico.

Anteriormente, Joel Santana ya había indicado que ese día contra el América él no estaba bien emocionalmente para dirigir el partido, pues sería su último juego al frente del Flamengo antes de hacerse cargo de la selección de Sudáfrica, a la cual dirigió en la Copa del Mundo de 2010.

El América se presentó el 7 de mayo de 2008 en la cancha del estadio Maracaná con una desventaja de dos goles (2-4), producto del partido de ida, por lo que para avanzar a los cuartos de final debía de vencer al Flamengo por tres anotaciones de diferencia o al menos derrotar por el mismo marcador (4-2) a los locales para definir todo en los penaltis. Algo impensable, sobre todo después de la pésima actuación en el primer encuentro en el estadio Azteca.

Contra todo pronóstico, las Águilas lograron la hazaña y vencieron 3-0 al Mengão en su casa para un global de 5-4. Los goles fueron obra de Salvador Cabañas en dos oportunidades y Enrique Esqueda. Fue el primer partido de Juan “el Cabezón” Luna al frente del América después de la renuncia de Rubén Omar Romano al finalizar el partido de ida.

Los de Coapa consiguieron superar al Santos de Brasil en los cuartos de final y terminaron cayendo ante la Liga de Quito en las semifinales por gol de visitante, esto después de empatar 1-1 en la Ciudad de México y 0-0 en Ecuador.