La tragedia familiar ocurrió en una vivienda ubicada en la compañía Costa Pucú, en San José de los Arroyos.

Las víctimas fatales fueron identificadas como Julio Goiris Ocampos (75) y su esposa Ramona Rojas (76). Sus restos fueron encontrados totalmente calcinados entre los escombros de la vivienda.

Los bomberos voluntarios fueron alertados por los vecinos y la policía, por lo que llegaron hasta el lugar lo más rápido posible.

Pero el fuego se propagó rápidamente por la casa y cuando controlaron el siniestro, ya fue muy tarde, atendiendo a que la estructura ya había sido totalmente consumida por las llamas.

Una vez que los socorristas enfriaron la zona, removieron los escombros y encontraron los cadáveres de los oga jára.

Funcionarios del Ministerio Público, acompañados por polis de Criminalística, se constituyeron hasta el lugar y levantaron evidencias, que podrían servir para buscar esclarecer el origen del siniestro, que se sospecha podría haber sido un cortocircuito.

El médico forense, Jorge Ríos, inspeccionó los cuerpos. Omombe’u que en estas condiciones será muy difícil determinar con exactitud la causa de muerte de ambos. Pero la hipótesis más fuerte es que, presumiblemente, fallecieron asfixiados por el humo y el calor.

El karai y su doña eran personas muy queridas por sus vecinos kuéra, inclusive, don Julio se desempañó ra’e como catequista en la capilla de su comunidad, ndaje.