Se cumplió un año desde que delincuentes internacionales asesinaron al fiscal Marcelo Pecci, especialista por combatir el crimen organizado y el narcotráfico, cuando disfrutaba del último día de su luna de miel en Barú-Colombia con su esposa, Claudia Aguilera.

Desde aquel fatídico día, la periodista Claudia Aguilera,  casi no socializó más, además de que se encontraba embarazada y con todo el estrés que le generó el magnicidio se apartó michimi del mundo, viviendo su duelo en el interior de su vivienda y apegada a sus afectos.

“Ella está sobreviviendo con el coraje de una mujer valiente con todo este proceso de su embarazo y dar a luz a su hijo”, comentó el abogado Sebastián Acha, vocero de la familia, a la 800 AM.

“El dolor es permanente y será por el resto de nuestras vidas. Preferimos que el dolor sea una fuerza motora”, añadió Acha.

Hace instantes, autoridades de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac) presentaron  el emblemático Convair 240 en homenaje al fiscal asesinado, donde estaba presente Claudia, bella pero con una mirada triste tras todos estos meses en que tuvo que enfrentar la catarata de emociones, el nacimiento de su bebé y el juicio a varios extranjeros quienes mataron a su mena.

Maricel Alberti, madre del agente asesinado, su esposa, Claudia Aguilera y otros familiares, junto a autoridades de la Dinac. (Foto: Néstor Soto/Nación Media).